Un amigo siempre comentaba su inolvidable momento en el trabajo. Gustaba de una señorita nueva. En un momento solo en su oficina se relaja y deja salir un oloroso y terrible gas. En ese instante entra la señorita en cuestion a darle unas ordenes de compras a firmar. Imaginen los dos solos, por fin... Inolvidable... para ella y para él que debía aun firmar 20 papeles. Un abrazo
Soberbio. ¿Y después se animó a arrimar el bochín? Hubiersa sido difícil porque, como decía mi abuelo, de la muerte y del ridículo no se vuelve. Cordialmente, Yo.
4 comentarios:
Un amigo siempre comentaba su inolvidable momento en el trabajo. Gustaba de una señorita nueva. En un momento solo en su oficina se relaja y deja salir un oloroso y terrible gas. En ese instante entra la señorita en cuestion a darle unas ordenes de compras a firmar. Imaginen los dos solos, por fin... Inolvidable... para ella y para él que debía aun firmar 20 papeles. Un abrazo
Soberbio. ¿Y después se animó a arrimar el bochín? Hubiersa sido difícil porque, como decía mi abuelo, de la muerte y del ridículo no se vuelve.
Cordialmente,
Yo.
Decime que era gangoso.
No, no, sólo pelotudazo.
Cordialmente,
Yo.
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